Mi hija me pidió que comprara estas barritas para hacer deporte, no porque sea vegana (en su mayoría es vegana, pero esto es por razones de sabor, y no fundamentalmente ético), sino porque no le gusta el sabor de la proteína de la leche. Compré y, por supuesto, probé. Nuestras opiniones con el cliente objetivo divergieron (nosotros, por regla general, tenemos una actitud completamente opuesta hacia los productos), en una dirección inesperada para mí; por lo general, sucede al revés. En mi opinión, este es un lodo raro. Ahora, si tomas un montón de hierba de pradera, un montón de algas, agregas stevia y lo sumerges en chocolate negro, puedes obtener algo como este sabor. De hecho, a juzgar por la composición, es solo una mezcla verde, que a menudo se encuentra en polvo: jugos secos de trigo y cebada, espirulina, arándanos, frambuesas, brotes de brócoli, remolacha, zanahorias. Todo esto se cubre con semillas de chía, trigo sarraceno y se le agrega sabor a fresa, lichi y naranja. También hay mantequilla de maní. La fuente de proteínas es el arroz, como edulcorantes: dátiles, jarabe de tapioca, inulina, pasas y stevia. El glaseado de chocolate contiene azúcar de caña. Todo es orgánico sin excepción. ¡No hay suficiente proteína! Me acostumbré a la proporción de 20 gramos de proteína por 60 gramos de peso total, y aquí de 15 a 75. Pero hay mucha fibra. Los bares son bastante grandes. Afuera - la barra de chocolate habitual. En el interior se pueden ver verduras densamente prensadas, e incluso se ven semillas de chía. ¡A pesar del sabor peculiar, el niño come con placer! Es cierto que el niño tiene 27 años. Pero este niño come muy poco, realmente: el costo de un mayor sentido del olfato. Y come. Después del entrenamiento deportivo, media barra cada vez (son grandes, más de los 60 gramos estándar). Así que ni siquiera sé qué decir, aconsejar o no. El resto de mis veganos se negaron a comerlo, uno incluso se negó a probarlo :) En general, es una pena que no haya un sampler, porque es algo muy útil, pero te puede gustar.
